En mi anterior post analizaba una de las principales fuentes de información que tradicionalmente han estado ligadas a la Vigilancia tecnológica, como son los documentos de patente, títulos de propiedad industrial otorgados en base a tres criterios: Novedad, actividad inventiva y aplicación industrial.
Asimismo, sintetizando los puntos que comentaba en el anterior post, nos permiten plantearnos y ofrecer posibles respuestas a determinadas cuestiones:
- ¿Quién ha hecho qué? ¿Con quién? ¿Están mis competidores / clientes / proveedores involucrados?
- ¿Cuáles son las áreas emergentes de mi ámbito de actividad? ¿Quién interviene?
- ¿Qué posibles repercusiones puede tener para mi nicho de mercado o modelo de negocio?
- ¿Cuáles son los enlaces con mis anteriores informaciones? ¿Señales de cambio?
Realmente este es un tipo de información nada desdeñable como fuente de información tecnológica, jurídica y estratégica, y más teniendo en cuenta la democratización en cuanto a acceso que ha supuesto el surgimiento y mejoras día a día de las bases de datos de libre acceso (Espacenet, WIPO, Google Patents, etc.), y que, como señalaba Lara Rey a modo de comentario, en términos información contenida / € resulta rentabilísima como fuente de información.
No obstante, este es el lado bueno de este tipo de información, pero existen una serie de aspectos que conviene tener en cuenta a la hora de tratar con ellas. Y es que:
- No todas las invenciones se patentan, ya que las empresas a menudo optan por estrategias alternativas para proteger, como por ejemplo el «lead time»: Salida rápida al mercado y mediante una fuerte campaña de marketing asociar el producto a una marca determinada. Se trataría, pues, de una protección indirecta.
- La terminología utilizada en los documentos de patente. De carácter jurídico/legal, que aumenta la opacidad de la información contenida y por tanto su comprensión.
- Contrainteligencia. Con la publicación de la patente (ya sea la solicitud o la patente concedida) está llegando una información valiosa a la competencia, con lo que se intentará ocultar o «disfrazar» en la medida de lo posible informaciones críticas.
- Los requisitos para patentar varían según los países.
- En relación, la «calidad» y «valor» varían enormemente. Se encuentran patentes con un posible retorno económico junto con otras de muy bajo valor.
- Familias de patentes. En función de la fase de tramitación y la organización o país donde se tramite, una misma invención da lugar a varios documentos de patente. Esto es importante tenerlo en cuenta a la hora de analizar una muestra determinada ya que puede dar lugar a interpretaciones y análisis erróneos.
- La propensión a patentar varia según el sector industrial y el tamaño de la empresa.